propuesta de solución para la corrupcion
Que la corrupción sea un fenómeno social no significa que nadie tenga autoridad moral para liderar la lucha contra ese mal. Lo que quiere decir es que para combatir la corrupción, paradójica mente, no basta con mandar a los corruptos a la cárcel: existen prácticas comunes en forma de incentivos, atajos, prebendas, que deberían ser cambiados, modificados o eliminados para lograr la cura esta enfermedad.
Es necesario impulsar un cambio social para combatir la corrupción con eficacia, iniciando con la construcción de cultura ciudadana, es decir, la promoción de comportamientos que hagan más fácil la convivencia en las ciudades ya que me atrevo a decir que, en Colombia, e incluso a nivel mundial, todas las personas adultas sin importar su nivel educativo, su profesión, su lugar de vivienda (zonas urbanas o rurales) tienen una opinión en común: el país está cansado de la corrupción y que este es el responsable de todos los males del país y del mundo.
De estas personas, una gran mayoría, llega a pensar que todos los políticos son iguales y que lo único que quieren es llegar a los cargos públicos para poder robar y beneficiar a sus familiares y amigos, sin considerar las necesidades de la comunidad y otro pensamiento que las personas tienen en común es creer que los únicos que pueden hacer algo por las regiones, ciudades o el país son los políticos.
Por todo lo anterior, para acabar con la corrupción y empezar a solucionar aquellos problemas que de verdad son prioritarios para la sociedad se hace necesario:
Que las personas sean políticamente activas, dejen de ser indiferentes y se vuelvan más críticas . Que sean personas que proponen ideas y soluciones, y que estén dispuestas al respeto de las diferencias y al debate, más patrióticas, que sientan su país no solo cuando algún deportista o la selección gana algún torneo; es tener sentido de pertenencia hacia su barrio, ciudad, región y sobre todo, país; sentir dolor de patria cada vez que un compatriota sufre o muere injustamente, por negligencia, falta de gestión por omisión, en fin; y tener la necesidad de hacer algo para que eso no vuelva a pasar.
Bibliográfica
Felipe Duarte Garcia. Una solución para la corrupción. Recuperado de https://www.las2orillas.co/una-solucion-la-corrupcion/
Jesus Alvarez. Veinte problemas contra la corrupción. Recuperado de
https://elpais.com/elpais/2013/07/12/opinion/1373639215_762378.html
Jesus Alvarez. Veinte problemas contra la corrupción. Recuperado de
https://elpais.com/elpais/2013/07/12/opinion/1373639215_762378.html
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